China rechaza críticas occidentales por arresto de cardenal en Hong Kong
China defendió el jueves el arresto de un cardenal católico de 90 años bajo la ley de seguridad nacional de Hong Kong, una acción que desató duras críticas internacionales y temores por la supresión de las libertades en la ciudad.
El cardenal católico Joseph Zen fue arrestado el miércoles junto a otros activistas prodemocracia por "conspirar con fuerzas extranjeras".
También fueron detenidos la cantante de pop cantonés Denise Ho, la abogada Margaret Ng y el profesor universitario Hui Po-keung, este último cuando intentaba viajar a Europa para asumir un puesto de trabajo.
"Las personas involucradas son sospechosas de conspirar con países extranjeros o fuerzas extranjeras para poner en riesgo la seguridad nacional, un acto de naturaleza grave", dijo en un comunicado la Oficina del Comisionado, que representa al ministerio chino de Relaciones Exteriores en Hong Kong.
Los cuatro fueron detenidos por su participación en un fondo de defensa, ya disuelto, que ayudó a cubrir los costos legales y médicos de los detenidos durante las grandes manifestaciones prodemocracia de 2019.
China respondió con una campaña para aplastar el movimiento y transformar a Hong Kong a su propia imagen autoritaria.
Zen y sus compañeros, quienes fueron liberados bajo fianza la noche del miércoles, se suman a las más de 180 personas detenidas bajo la ley de seguridad nacional que impuso Pekín para contener las protestas.
A la mayoría de los arrestados se les niega fianza y pueden ser sentenciados con hasta condenas de cadena perpetua.
- "Preocupante" -
Países occidentales criticaron los arrestos y acusaron a Pekín por socavar las libertades que había prometido mantener en Hong Kong.
Estados Unidos, que sancionó a autoridades chinas por la represión, pidió a Pekín "parar de acosar a los activistas de Hong Kong".
La ministra canadiense de Relaciones Exteriores, Melanie Joly, calificó los arrestos como "profundamente preocupantes".
Ho, una popular cantante y activista LGTBQ de Hong Kong, tiene también nacionalidad canadiense.
Por su parte, el jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell, dijo que siguió los arrestos con "gran preocupación", mientras Human Rights Watch lo calificó como un "nuevo e impactante punto bajo para Hong Kong".
"Incluso para los recientes estándares de agravamiento de la represión en Hong Kong, estas detenciones representan una escalada impactante", agregó Amnistía Internacional.
A su vez, el Vaticano dijo estar preocupado con el arresto de Zen y añadió que "sigue el desarrollo de la situación muy de cerca".
- Espada de Damocles -
El cardenal Zen huyó de Shanghái y fue a Hong Kong luego de que los comunistas tomaron el poder en China en 1949, y se convirtió en obispo de la ciudad.
Ha sido un defensor del movimiento democrático de Hong Kong y llegó a acusar al Vaticano de abandonar a la Iglesia católica clandestina de China al alcanzar un acuerdo con Pekín sobre el nombramiento de obispos.
La diócesis de Hong Kong comentó el jueves que está "muy preocupada por la condición y seguridad del cardenal Joseph Zen".
Por su parte, el misionero italiano Franco Mella dijo a AFP que el arresto de Zen es "un golpe a toda la iglesia en Hong Kong, China y el mundo", y que "resulta obvio que hay una espada de Damocles sobre Zen y otras personas de la Iglesia".
A.Fischer--MP