Trabajo o libertad, el dilema que plantea el filme argentino "Los delincuentes" en Cannes
Pasar unos años en la cárcel o toda una vida trabajando. Este es el dilema que tienen dos modestos empleados de banca en "Los delincuentes", del argentino Rodrigo Moreno, presentada este jueves en Cannes.
Morán, un trabajador rutinario y aparentemente disciplinado, lo tiene claro: mejor urdir un plan para robar una suma equivalente a su sueldo durante 25 años y poder disfrutar de la vida tras pasar brevemente por la cárcel, que fichar cada día en su empresa hasta jubilarse.
Esta historia, inspirada libremente de la película policíaca argentina "Apenas un delincuente" (1949), le permite a Moreno retomar uno de sus temas predilectos, la disyuntiva entre el trabajo y una vida más libre y ociosa.
Ya en "El descanso" (2002), que codirigió, unos tipos deciden ocupar un hotel abandonado para no trabajar el resto de sus vidas. También en "El custodio" (2006) trata la presión del trabajo, y "Réimon" (2014) es sobre una empleada doméstica.
Aunque en el filme original de 1949, el protagonista aspira a volverse millonario con su botín, en "Los delicuentes" Moreno decide que "sus" ladrones cometan un "robo modesto", justo lo que necesitan para no trabajar más y vivir correctamente.
El espectador puede empatizar con la filosofía de estos personajes, para darse cuenta de que "nuestra vida se reduce al trabajo", incide el cineasta de 50 años, en una entrevista con AFP.
- Naturaleza "liberadora" -
"Los delicuentes", que dura algo más de 3 horas, transcurre entre Buenos Aires y una zona montañosa de la provincia de Córdoba, en el centro del país.
El espacio urbano representa la monotonía aplastante del trabajo, casi como una cárcel, y las zonas en plena naturaleza son "liberadoras".
Para hablar de la "vida libre", tenía que filmarla, dice el director, justificando así la larga duración del filme.
"Filmo el trabajo, filmo la rutina, filmo la presión que esa rutina ejerce sobre la persona, pero al mismo tiempo tengo que filmar la incertidumbre de la vida libre, la vida incierta, la vida que no sabes a dónde te va a llevar", abunda.
De estructura compleja, la cinta está dividida en grandes bloques y "flashbacks", que relatan la historia de una forma casi simétrica. Esta fragmentación, con saltos temporales, se inspira en parte del cine del estadounidense Quentin Tarantino, cuenta Moreno.
- "Segundas oportunidades" -
"Los delicuentes" concursa en Una Cierta Mirada, la segunda competición más importante de Cannes, dedicada a los nuevos talentos, una forma alternativa de participar por primera vez en el certamen.
Moreno explica que ya con "El custodio", su ópera prima, recibió hace más de 15 años una llamada del delegado general del festival, Thierry Frémaux, para proyectarla en Una Cierta Mirada. Los productores y distribuidores alemanes del filme insistieron en que sólo aceptarían que la cinta concursara por la Palma de Oro. Como no fue posible, el largometraje fue finalmente presentado en la Berlinale, donde fue premiado.
Y desde entonces, el festival alemán ha acogido otras de sus películas, como "Un mundo misterioso" (2011), en liza por el Oso de Oro.
Esta vez, con "Los delicuentes" llega directamente a una de las secciones más prestigiosas de la muestra francesa. Así son las "segundas oportunidades", zanja Moreno.
S.Kraus--MP