Calma frágil en Chipre tras un incidente en la zona tampón de la ONU
Una frágil calma reinaba el lunes en la zona tampón en la dividida isla de Chipre, luego de que la ONU acusó el viernes a las fuerzas chipriotas turcas de herir a varios Cascos Azules que trataban de bloquear la construcción de una controvertida carretera.
El incidente, uno de los más graves en varios años, provocó condenas internacionales.
Los hechos ocurrieron en Pyla, (Pile, en turco), único pueblo donde viven juntos chipriotas turcos y griegos, en la línea verde vigilada por la ONU que divide la isla entre la República de Chipre, miembro de la Unión Europea --que ejerce su autoridad en el sur-- y la autoproclamada República Turca de Chipre Norte (RTCN), reconocida únicamente por Turquía, que invadió el tercio norte de la isla en 1974.
"Todo está en calma en Pyla," declaró el lunes por la mañana a AFP Aleem Siddique, portavoz de la Fuerza de mantenimiento de la paz de las Naciones unidas en Chipre (Unficyp).
"La misión esta lista para bloquear cualquier reanudación de los trabajos de construcción", declaró, y agregó que los Cascos azules que resultaron heridos salieron del hospital.
Vídeos difundidos en redes sociales mostraron a los bulldozers apartando a vehículos de la ONU, barreras de hormigón y alambres de espino, mientras un grupo de policías chipriotas turcos empujaban a los cascos azules.
El secretario general de la ONU, António Guterres, denunció unos hechos "inaceptables" que "podrían constituir graves crímenes ante el derecho internacional", según un comunicado de su portavoz.
Tanto la República de Chipre como la Unión Europea, Estados Unidos, Francia y Reino Unido se sumaron a la denuncia de la ONU.
Los esfuerzos para reunificar la isla dividida se han estancado desde el colapso de la última ronda de conversaciones respaldadas por la ONU en 2017.
Las autoridades de la RTCN indicaron que el proyecto busca facilitar los movimientos de su población y rechazaron las acusaciones "infundadas" de la misión de la ONU.
A.Meyer--MP