Ucrania reivindica un ataque con drones desde territorio ruso
Ucrania aseguró este viernes que el reciente ataque con drones contra un aeropuerto del noroeste de Rusia se llevó a cabo desde territorio ruso, en plena contraofensiva para liberar las zonas ocupadas.
Los ataques con drones contra Moscú y otras ciudades rusas imputados a Ucrania son casi diarios desde hace meses. Las fuerzas rusas, en tanto, continúan bombardeando masivamente las localidades ucranianas.
El miércoles de madrugada, el aeropuerto de Pskov, una ciudad rusa situada cerca de la frontera con Estonia, Letonia y Bielorrusia, a 700 kilómetros de Ucrania, fue objeto de un ataque con drones ucranianos.
"Los drones usados para atacar la base aérea 'Kresty' en Pskov fueron lanzados desde Rusia", afirmó Kyrylo Budanov este viernes en Telegram, incluyendo en su mensaje un enlace a una entrevista que ofreció al medio The War Zone.
Es la primera vez que Kiev reconoce operar desde dentro del territorio ruso, donde se han producido varios bombardeos con drones y presuntos actos de sabotaje, además de una serie de incursiones armadas por parte de combatientes rusos a favor de Ucrania.
"Operamos desde el territorio de Rusia", insistió Budanov en la entrevista con The War Zone.
Según esa publicación, el responsable militar no precisó si el ataque contra Pskov fue obra de sus hombres o de combatientes rusos que actúan a cuenta de Ucrania.
El Kremlin, por su parte, rechazó comentar la reivindicación. El portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, consideró que se trataba de "una prerrogativa de nuestros militares".
- Aviones destruidos -
Según Budanov, dos aviones militares rusos fueron destruidos y otros dos gravemente dañados. The War Zone publicó imágenes satelitales de las aeronaves calcinadas.
La semana pasada, un ataque parecido impactó en un aeródromo de Novgorod, una región vecina, destruyendo o dañando al menos un avión militar.
El jueves, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, anunció complacido que su país alcanzó un objetivo a 700 km de distancia, sin aludir a ningún caso específico.
"El resultado de nuestras armas, las nuevas armas ucranianas, es 700 kilómetros. El objetivo es llegar aún más lejos", dijo.
A finales de junio, Zelenski ya se había congratulado por que "la guerra llegue a territorio de Rusia".
Ucrania intenta llevar los combates a suelo ruso, al tiempo que continúa con su contraofensiva para liberar las zonas ocupadas del este y del sur del país. De momento, los avances de esa operación han sido limitados.
El presidente ucraniano señaló este viernes que no podrá haber una "paz duradera en Ucrania, y ni siquiera en Europa" hasta que Rusia no se retire de la península de Crimea, anexionada por Moscú en 2014, del Donbás y del resto de territorios ocupados.
"Crimea, una península que atraía a turistas y empresas, es hoy un territorio ocupado y militarizado incapaz de desarrollarse", señaló Zelenski por videoconferencia durante el foro económico The European House - Ambrosetti, en Cernobbio, en el norte de Italia.
- Vuelta a las aulas bajo amenaza -
Este viernes, tanto en Ucrania como en Rusia los estudiantes volvieron a las clases.
Un primer día de curso que se vio perturbado en Kiev, donde la policía informó de amenazas de bomba contra establecimientos de la capital ucraniana, que afirmó inspeccionar. Sin embargo, no se ordenó ninguna evacuación generalizada.
"Recibimos información sobre la presencia de explosivos en escuelas de Kiev [...] Todos los centros de enseñanza están siendo controlados por la policía", dijo a la AFP la portavoz de la policía, Yulia Girdvilis.
Rusia también estrenó curso escolar, con un programa cargado de materias de índole patriótica. El presidente Vladimir Putin tenía previsto intervenir durante una clase.
Putin recibirá el lunes al presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, en la ciudad rusa de Sochi, a orillas del mar Negro.
La cuestión del transporte internacional de granos, tanto ucranianos como rusos, vitales para los países empobrecidos, estará en el orden del día.
Rusia se retiró en julio del acuerdo sobre cereales respaldado por la ONU y que Turquía ayudó a negociar, revocando de hecho la navegación segura para los buques civiles que navegan por el mar Negro.
Aún así, dos nuevos buques zarparon de un puerto ucraniano y navegan por el mar Negro, utilizando un corredor marítimo que Kiev estableció para garantizar la seguridad de la navegación.
Ello a pesar de que Rusia había advertido de que atacaría cualquier barco que saliese de Ucrania para cruzar ese mar.
E.Schmitt--MP