La Corte Suprema brasileña rechaza el proyecto que limita sus atribuciones
El Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil rechazó este jueves la propuesta que avanza en el Congreso para limitar las atribuciones individuales de sus jueces, al advertir que puede representar un "retroceso democrático".
"No se sacrifican las instituciones en el altar de las conveniencias políticas", dijo Luís Roberto Barroso, presidente del STF, en una declaración en nombre de la máxima corte del país en la apertura del plenario de este jueves.
En la víspera, el Senado brasileño aprobó el proyecto que prohíbe las "decisiones monocráticas" de los once miembros del STF, en favor de una "decisión colegiada" tomada por una mayoría.
De ser aprobada, la iniciativa legislativa significaría un cambio en la Constitución.
El STF "ve con preocupación los avances legislativos sobre su actuación", tras "los ataques verbales (del gobierno de Jair Bolsonaro) y físicos", en referencia a la asonada contra las sedes de los poderes públicos en Brasilia el 8 de enero por parte de seguidores del exmandatario (2019-2022).
El expresidente ultraderechista mantuvo enfrentamientos constantes con los magistrados ante decisiones que contradecían sus intereses, y llegó a amenazarlos.
El máximo tribunal advirtió que en "todos los países que recientemente vivieron un retroceso democrático, la erosión de las instituciones comenzó por cambios en las cortes supremas".
La iniciativa, que aún debe ser debatida en la Cámara de Diputados, constituye un nuevo enfrentamiento de los poderes tras decisiones controvertidas sobre tierras indígenas.
"Es inevitable que el Supremo desagrade a segmentos políticos, económicos y sociales" por su abordaje de cuestiones polémicas, agregó el presidente del STF.
Pero "no hay institucionalidad que resista si cada sector que se sienta contrariado por decisiones del Tribunal quiere modificar su estructura y funcionamiento".
A su turno, el juez Gilmar Mendes aseguró que el "tribunal no admite intimidaciones" y está preparado para "enfrentar una vez más, si fuera necesario, embestidas desmedidas e inconstitucionales".
El juez Alexandre de Moraes, también presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE) y otrora blanco favorito de Bolsonaro, aseguró de su lado que la corte "no se compone ni de cobardes ni de miedosos", por lo que "demostrará coraje" para defender la independencia del poder Judicial.
El presidente de la Cámara Alta, Rodrigo Pacheco, alineado con el gobierno del izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva, reiteró este jueves ante la prensa que el proyecto "no constituye ningún tipo de enfrentamiento o represalia" al STF, y rechazó "agresiones" de parte del tribunal.
El debate en el Congreso para limitar el poder del STF se aceleró las últimas semanas tras varias decisiones de la corte a contramano de las mayorías en el Legislativo, especialmente en relación con la demarcación de tierras indígenas.
El STF falló en septiembre en contra del "marco temporal", que otorga a los indígenas derecho a reclamar solo por territorios que ocupaban el 5 de octubre de 1988, cuando se promulgó la Carta Magna.
Una semana después, el Senado consagró esa tesis, pero el texto fue vetado luego por Lula.
L.Sastre--MP