"Miedo" en la frontera norte de Israel por un posible conflicto con Líbano
En el norte de Israel, cerca de la frontera con Líbano, los habitantes tienen "miedo" de que la muerte del número dos de Hamás en Beirut pueda desencadenar una guerra con su vecino.
Desde que comenzó la guerra entre Israel y Hamás el 7 de octubre, el ejército israelí intercambia casi diariamente disparos con el Hezbolá libanés, aliado del movimiento islamista palestino.
En la ciudad costera de Nahariya, a unos kilómetros de la frontera, el temor ya presente por la violencia aumentó un grado tras la muerte de Saleh Al Aruri el martes por la noche en Beirut, en un ataque atribuido a Israel.
"Esta mañana no sabíamos si mandar a los niños a la escuela por miedo a la respuesta del Hezbolá a lo que ocurrió ayer", explica Lee Zorviv, de 40 años, propietaria de una tienda de ropa.
Hezbolá prometió venganza y calificó el "asesinato" como "un grave ataque contra Líbano (...) y un acontecimiento peligroso en el curso de la guerra".
La última guerra entre Israel y Hezbolá a mediados de 2006 dejó más de 1.200 muertos en Líbano, en su mayoría civiles, y 160 en Israel, en su mayoría soldados.
Los cascos azules de la ONU que patrullan la frontera en el lado libanés, advirtieron el miércoles de las "consecuencias devastadoras" que podría tener una escalada entre Israel y el poderoso movimiento chiita.
Hezbolá, apoyado por Irán, habría acumulado un arsenal considerable en las últimas décadas, mientras que Israel recibe apoyo militar de Estados Unidos.
En Nahariya, los niños terminaron antes sus clases y todo el mundo anda pegado al teléfono para enterarse de las últimas noticias, cuenta Zorviv.
"La situación es muy, muy mala y el ánimo de la gente está por los suelos", añade.
- "Tenemos miedo" -
Además de temer una guerra con Líbano, los israelíes están preocupados por sus ingresos, que no dejan de disminuir.
"La actividad cayó un 50%" en las últimas semanas, indica Lee Zorviv, añadiendo que algunas empresas cerraron.
Shalev, vendedor de 18 años que ni quiso dar su apellido, afirma que no tiene "más remedio" que trabajar pese al miedo, ya que debe cubrir sus necesidades.
Desde la costa se divisan los buques de guerra a lo lejos, detrás de barcos de pesca y de los poco bañistas que desafían las bajas temperaturas del invierno.
Un soldado describe el lugar como "una zona militar cerrada".
"Las fuerzas israelíes están en un estado de alerta muy elevado en todos los ámbitos, tanto en defensa como en ataque", declaró su portavoz, Daniel Hagari, el martes por la noche, después de la conmoción provocada por el ataque atribuido a Israel en los suburbios del sur de Beirut, bastión de Hezbolá.
"Estamos altamente preparados para cualquier escenario", añadió, sin hacer comentarios sobre el ataque en Beirut.
En Nahariya, tanto adolescentes como personas mayores que hablaron con la AFP sin querer dar sus nombres completos describieron el miedo que se ha apoderado de la ciudad, donde mucha gente lleva ahora sus armas.
"Tenemos miedo, estamos en estado de guerra", asegura Lee Zorviv.
R.Schmidt--MP