El ministro de Economía de Cuba es destituido en plena crisis del combustible
El ministro de Economía de Cuba, Alejandro Gil, fue destituido por el Consejo de Estado, entre otros cambios de altos funcionarios, en un contexto de crisis por el anuncio del aumento del precio del combustible, informó el viernes el diario oficial Granma.
"El Consejo de Estado, a propuesta del Presidente de la República", Miguel Díaz-Canel, acordó "liberar de sus responsabilidades como viceprimer ministro y ministro de Economía y Planificación al compañero Alejandro Gil Fernández", informó el periódico en su página web. Su lugar será ocupado por Joaquín Alonso Vázquez, actual presidente del Banco Central.
Gil ocupaba el cargo desde 2018 y es miembro del Comité Central del gobernante y único Partido Comunista de Cuba (PCC).
El anunció del gobierno, que se publicó al mediodía en el Granma, medio considerado la voz del PCC, informó que también fue removido el ministro de Industria Alimentaria, otra área en la mira de las autoridades que insisten en la necesidad de incentivar la producción de alimentos, en un país que importa el 100% de la canasta básica, según datos oficiales.
Las autoridades también decidieron "liberar por renovación al compañero, Manuel Santiago Sobrino Martínez del cargo de Ministro de la Industria Alimentaria" y designar en su lugar a Alberto López Díaz, actual Gobernador de Villa Clara, una provincia del centro del país.
Los cambios en el gobierno de Díaz-Canel ocurren dos días después de que las autoridades aplazaran el aumento de más de 500% del precio del combustible, previsto para el jueves, sin dar aún nueva fecha de entrada en vigor de la medida.
La prórroga obedeció a "un incidente de ciberseguridad en los sistemas informáticos (...) cuyo origen se ha identificado en un virus desde el exterior", que está en investigación, informó una funcionaria del ministerio de Economía, a menos de 24 horas de que subieran los precios de la gasolina.
Las autoridades habían anunciado a principios de mes el incremento a partir del 1 de febrero, como parte de una batería de medidas que incluye también un alza de 25% de las tarifas de la electricidad para el sector de mayor consumo y a la factura de gas licuado.
Esta semana las filas en las estaciones de gasolina de La Habana se extendían por cuadras a todas horas, incluidas las madrugadas. Los automovilistas se impacientan cada vez más esperando llenar sus tanques antes del duro aumento.
- Subsidios -
A finales de diciembre el gobierno admitió que era insostenible continuar vendiendo el combustible a precios "subsidiados".
Gil, uno de los político de más alto perfil hasta ahora en la isla, admitió que el gobierno no podía seguir subsidiando el combustible.
"El país no puede mantener el precio del combustible, que es el más barato del mundo", adelantó en diciembre el ya exministro de Economía.
Cuba afronta una crónica crisis de combustibles, agravada desde abril. El gobierno argumenta que se debe al incumplimiento de países que suministran a la isla.
El gobierno, que subvenciona casi el total de los servicios y bienes básicos que consumen los cubanos, esbozó en diciembre un paquete de medidas para revertir la crisis económica que enfrenta el país por los efectos de la pandemia, las distorsiones internas de su economía y el recrudecimiento de las sanciones impuestas por el expresidente republicano Donald Trump que casi no han variado en los tres años de gobierno del demócrata Joe Biden.
De acuerdo con estimaciones oficiales, la economía cubana se contrajo hasta un 2% en 2023, mientras que la inflación cerró en un 30%, menos que el 39% registrado en 2022.
T.Gruber--MP