Crece el temor ante una eventual ofensiva terrestre de Israel en Rafah, en el sur de Gaza
El ejército israelí bombardea este sábado la zona de Rafah, en el extremo sur de la Franja de Gaza, donde se hacinan centenares de miles de civiles y cuya evacuación reclamó el primer ministro Benjamin Netanyahu antes de una posible ofensiva terrestre.
Varios testigos dieron cuenta en las primeras horas del sábado de bombardeos en los alrededores de esa localidad, donde viven 1,3 millones de palestinos, es decir, más de la mitad de la población total de la Franja de Gaza. En su gran mayoría, se trata de refugiados que huyeron de los combates en otras zonas del enclave.
El ministerio de Salud del movimiento islamista palestino Hamás, que gobierna la Franja desde 2007, indicó que por la noche se habían notificado 110 decesos y también informó de "intensos combates" este sábado en el hospital Nasser de Jan Yunis, en el sur del territorio. El viernes, las fuerzas israelíes allanaron el otro gran hospital de esa ciudad, Al Amal.
Tras pasar por la ciudad de Gaza y por Jan Yunis, las fuerzas israelíes prepararían ahora una operación terrestre en Rafah, fronteriza con Egipto, en el marco de su operación militar contra Hamás.
Netanyahu, que el miércoles instó al ejército a preparar una ofensiva contra Rafah, pidió el viernes a los militares que elaboren un "plan combinado" de "evacuación" de civiles de Rafah y de "destrucción" de Hamás en esa ciudad y que se lo entreguen.
"Es imposible lograr el objetivo de la guerra sin eliminar a Hamás y dejando cuatro batallones de Hamás en Rafah", afirmó el dirigente israelí. Para ello, es necesario que "los civiles evacuen las zonas de combate", añadió.
En esa localidad, crece el temor de los habitantes ante una posible ofensiva terrestre.
"Si ellos [el ejército israelí] invaden Rafah, como dijo Netanyahu, habrá matanzas y ya podemos despedirnos de cualquier [muestra de] humanidad", declaró en Rafah Adel al Hajj, un desplazado.
- Consecuencias "catastróficas" -
Fotógrafos de la AFP vieron varios edificios de Rafah destruidos por bombardeos israelíes a primeras horas del viernes. Varias personas transportaban los cuerpos de tres niños, muertos en uno de esos ataques.
"Forzar a más de un millón de palestinos desplazados en Rafah a evacuar de nuevo [la ciudad] sin encontrar un lugar seguro adonde ir sería ilegal y tendría unas consecuencias catastróficas", señaló Nadia Hardman, especialista en derechos de personas migrantes y de refugiados para la oenegé Human Rights Watch.
Naciones Unidas ha expresado su temor por los civiles en Rafah en varias ocasiones y Estados Unidos advirtió el jueves que podía suceder un "desastre" humanitario. Además, alertó que no apoyaría una operación "sin planificación y sin reflexión" respecto al destino de los civiles.
En una inusual crítica hacia Israel desde que empezó la guerra, hace cuatro meses, el presidente estadounidense, Joe Biden, juzgó "excesiva" la "respuesta en la Franja de Gaza" al ataque del 7 de octubre.
El conflicto estalló ese día, cuando milicianos islamistas mataron a más de 1.160 personas, en su mayoría civiles, y secuestraron a unas 250 en el sur de Israel, según un balance de la AFP basado en datos oficiales israelíes.
En respuesta, Israel prometió "aniquilar" Hamás y lanzó una incesante campaña de bombardeos y operaciones terrestres contra Gaza, donde han muerto hasta ahora 27.947 personas, principalmente mujeres, niños y adolescentes, según el ministerio de Salud del gobierno de Hamás.
- Conversaciones "positivas" -
En el frente diplomático, un "nuevo ciclo de negociaciones", auspiciado por Egipto y Catar, y con la participación de Hamás, empezó el jueves en El Cairo con el fin de obtener "calma en la Franja de Gaza" y un canje de rehenes en manos del movimiento islamista por presos palestinos en Israel, indicó un alto funcionario egipcio.
La delegación de Hamás dejó la ciudad el viernes después de unas "conversaciones buenas y positivas" con los mediadores, dijo una fuente del grupo.
Una tregua de una semana a fines de noviembre permitió canjear a un centenar de rehenes por presos palestinos. Se estima que unas 132 personas capturadas el 7 de octubre permanecen todavía en Gaza, y que 29 de ellas habrían fallecido.
Según el portal Axios, el jefe de la CIA viajará la próxima semana a Egipto para intentar lograr una nueva pausa en los combates y la liberación de rehenes.
La guerra en Gaza también exacerbó las tensiones en Líbano, Irak, Siria y Yemen, donde grupos apoyados por Irán han lanzado ataques en apoyo a Hamás, generando represalias de Israel y de Estados Unidos y sus aliados.
Israel efectuó bombardeos el viernes por la noche en los alrededores de la capital siria, Damasco, según la agencia oficial siria Sana, que reportó daños "materiales". El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH) afirmó que tres personas murieron en ese ataque.
A.Schneider--MP