Prosiguen negociaciones para tregua en Gaza tras "avances significativos"
Los mediadores prosiguen este lunes en Egipto las negociaciones para alcanzar una tregua en Gaza entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamás, tras haber logrado la víspera "avances significativos".
La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, urgió el domingo que se acepte la propuesta de un alto el fuego de seis semanas "dada la inmensa escala de sufrimiento" en Gaza, bajo incesantes bombardeos israelíes y al borde de la hambruna.
Según el ministerio de Salud de Hamás, más de 100 personas, mayoritariamente civiles, murieron en los más recientes bombardeos israelíes en varios sectores de Gaza, llevando la cifra total de fallecidos en casi cinco meses de conflicto a 30.534.
La guerra estalló tras el ataque sin precedentes de comandos de Hamás en Israel el 7 de octubre, en el que murieron unas 1.160 personas, sobre todo civiles, según un recuento de la AFP a partir de datos israelíes.
Representantes de Egipto, Hamás, Catar y Estados Unidos negocian en El Cairo una tregua y una cadena de televisión cercana al gobierno egipcio reportó que se lograron "avances significativos".
Los mediadores llevan semanas intentando obtener un cese el fuego y la liberación de los rehenes retenidos en Gaza a cambio de la excarcelación de presos palestinos.
Alrededor de 250 personas fueron secuestradas por los islamistas en el ataque del 7 de octubre. Una tregua a finales de noviembre permitió la liberación de 105 rehenes a cambio de 240 presos palestinos.
"Egipto continúa con sus intensos esfuerzos para alcanzar una tregua antes del ramadán" que comenzará el 10 u 11 de marzo, indicó AlQahera News, citando a "un alto funcionario".
- "¡No hay excusas!" -
Para aceptar un acuerdo, Hamás exige el regreso al norte de Gaza de los desplazados, un aumento de la ayuda humanitaria, un alto el fuego definitivo y la retirada de los militares israelíes.
Israel, que no participa en las negociaciones de El Cairo, rechaza estas condiciones y afirma que continuará sus operaciones militares hasta "aniquilar" a Hamás. También exige que el movimiento islamista entregue una lista de los rehenes que siguen retenidos en Gaza.
La ONU advirtió que la hambruna es "casi inevitable" para 2,2 millones de los 2,4 millones de habitantes de este estrecho territorio, sometido a un bloqueo terrestre, aéreo y marítimo israelí desde que Hamás tomó el poder en 2007.
Además, barrios enteros han sido arrasados y 1,7 millones de personas desplazadas. La mayoría viven hacinadas en Rafah, en el sur de Gaza, junto a la frontera cerrada con Egipto.
"Dada la inmensa escala de sufrimiento en Gaza, debe haber un alto el fuego inmediato por al menos las próximas seis semanas, que es lo que está actualmente sobre la mesa", dijo el domingo Kamala Harris. Es la primera vez que un alto funcionario de Estados Unidos, principal aliado de Israel, pide abiertamente un cese de las hostilidades.
Harris instó también a Israel, que controla la entrada de la ayuda humanitaria a Gaza, a "aumentar significativamente el flujo de ayuda" para una población que "necesita urgentemente comida, agua y otro tipo de asistencia".
"Israel no debe imponer restricciones al suministro de ayuda". "¡No hay excusas!", añadió.
- "Conflagración mucho más amplia" -
Ante las dificultades para transportar ayuda por carretera, varios países, incluyendo Estados Unidos, lanzaron en los últimos días raciones de comida desde el aire sobre la Franja de Gaza.
En las últimas horas, los bombardeos israelíes han tenido como objetivo Rafah y Jan Yunis, en el sur, Jabaliya y Nusseirat, en el centro, y Ciudad de Gaza, en el norte, según el gobierno de Hamás y testigos.
En el norte de Israel, cerca de la frontera con Líbano, socorristas israelíes anunciaron la muerte de un trabajador extranjero tras el disparo de un misil antitanque.
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, advirtió que la guerra en Gaza puede conducir a una "conflagración mucho más amplia".
"Estoy profundamente preocupado de que en este polvorín cualquier chispa pueda conducir a una conflagración mucho más amplia", dijo ante el Consejo de Derechos Humanos en Ginebra, asegurando que "esto tendría implicaciones para todos los países de Oriente Medio y para muchos otros".
A.Gmeiner--MP