El gobierno británico apela una decisión contraria a la ley de amnistía en Irlanda del Norte
El gobierno británico anunció este jueves que apeló la decisión de un tribunal de Belfast contra la ley de amnistía a soldados y paramilitares que actuaron en el conflicto en Irlanda del Norte.
"Tras haber examinado todos los aspectos del juicio, el gobierno británico presentó una demanda ante el Tribunal de Apelación de Irlanda del Norte", anunció un portavoz del ejecutivo conservador.
"Tenemos la determinación de aplicar" la ley de amnistía, añadió.
El 28 de febrero, un tribunal de Belfast dictaminó que esa ley controvertida, que otorga inmunidad a combatientes del conflicto en Irlanda del Norte que colaboren con la justicias es incompatible con los derechos humanos.
Varias víctimas de la violencia cometida durante las tres décadas sangrientas que padeció la región habían emprendido acciones legales para cuestionar la conformidad de este texto, adoptado en septiembre en Londres, pese a la oposición de los partidos políticos locales, de las organizaciones de víctimas y del gobierno irlandés.
Este texto controvertido pretende retirar los procedimientos contra soldados británicos y paramilitares que decidan cooperar con las autoridades.
El juez Adrian Colton, del Tribunal Superior de Belfast, dijo estar "convencido" de que las disposiciones contenidas en la ley y relacionadas con la inmunidad "constituyen una violación de los derechos" de quienes quieran iniciar procedimientos, basándose en la Convención Europea de Derechos Humanos (CEDH).
"No es evidente que el hecho de otorgar inmunidad a través de esta ley contribuya de alguna manera a la reconciliación en Irlanda del Norte, sino todo lo contrario", añadió Colton.
Más de 3.500 personas murieron durante las tres décadas del conflicto de Irlanda del Norte, entre unionistas, principalmente protestantes, y republicanos, en su mayoría católicos, y en el que también intervino el ejército británico.
Más de 25 años después de la firma de un acuerdo de paz, en 1998, unas 1.200 muertes siguen siendo investigadas por la policía, según el gobierno británico.
En opinión de las autoridades del Reino Unido, la ley permitiría cerrar cientos de estos casos sin resolver.
J.Becker--MP