El presidente catalán convoca elecciones regionales anticipadas el 12 de mayo
El presidente del gobierno catalán, Pere Aragonès, anunció este miércoles que convocará elecciones regionales para el 12 de mayo, adelantando así la fecha prevista para inicios del próximo año, después de que el Parlamento de esta región española rechazara su proyecto de presupuestos.
"He decidido convocar elecciones al Parlamento de Cataluña para el próximo 12 de mayo", indicó Aragonès en una breve comparecencia en Barcelona.
La decisión del presidente catalán, un independentista moderado del partido Izquierda Republicana de Cataluña (ERC), llega horas antes de que el Congreso de los Diputados español se reúna para aprobar el jueves una polémica ley para amnistiar a los encausados por su participación en el fallido intento de secesión de esta región del noreste de España en 2017.
La aprobación en la Cámara de Diputados del texto -que fue la condición impuesta por los partidos separatistas para dar su indispensable apoyo al socialista Pedro Sánchez para un nuevo mandato- no debería, sin embargo, peligrar, puesto que ERC, habitual apoyo parlamentario del ejecutivo de izquierdas, y el otro partido independentista, Junts per Cataluña (JxCat), ya expresaron su apoyo al texto.
El movimiento de Aragonès supone, no obstante, un giro de guión respecto a sus planes de completar el mandato hasta febrero de 2025.
Pero en clara minoría tras la abrupta salida del gobierno regional de Junts per Catalunya -el partido fundado por Carles Puigdemont, de una línea separatista más dura- en octubre de 2022, el rechazo este miércoles a tramitar sus cuentas en la cámara regional le abocaba a unos meses agónicos.
"Siempre he dicho que mi objetivo era agotar la legislatura, pero los vetos cruzados entre los grupos políticos del Parlamento [regional, nldr] impiden tener las condiciones para hacerlo posible", reconoció este miércoles Aragonès.
Enfrentados por el rumbo que debía tomar el independentismo tras la fallida tentativa de secesión de 2017, el partido de Puigdemont y ERC fueron aumentando sus divisiones y recrudeciendo su tradicional rivalidad electoral en la región.
Muy crítico con la gestión de Aragonès, Junts fue uno de los partidos que votó para tumbar su proyecto de presupuestos, como hicieron el resto de grupos menos ERC y el Partido Socialista catalán.
La sorpresa llegó desde el grupo de los Comuns, una formación de izquierdas que decidió finalmente mantener su negativa tras no obtener el compromiso del ejecutivo regional de que vetaría el proyecto de un polémico casino en una zona costera.
- Ley de amnistía -
Tras el adelanto, las nuevas elecciones en esta dinámica región de ocho millones de habitantes, y uno de los motores económicos de España, se celebrarían antes de que la ley de amnistía esté completamente aprobada por el Parlamento español, ya que todavía debe pasar su trámite en el Senado.
Eso, en teoría, podría complicar la postulación de varios potenciales candidatos como el propio Carles Puigdemont, quien es eurodiputado y reside en Bélgica desde hace más de seis años para esquivar la justicia española.
Muy presente en el debate político español, Cataluña fue escenario de una fallida intentona separatista en 2017, desatando una de las peores crisis de la España contemporánea.
Después de su llegada al poder en 2018 en Madrid, menos de un año después del intento de secesión, el socialista Pedro Sánchez hizo de la distensión en Cataluña una de sus prioridades.
Así, en 2021 indultó a los nueve dirigentes separatistas condenados a prisión, mientras que al año siguiente su mayoría reformó el Código Penal para suprimir el delito de sedición por el que fueron juzgados.
Tras las elecciones legislativas de 2023, en las que quedó por detrás del conservador Partido Popular, se comprometió a impulsar la polémica ley de amnistía a cambio del apoyo clave de los partidos separatistas catalanes.
E.Schmitt--MP