Las aeronaves estadounidenses Osprey vuelven a volar en Japón tras un accidente mortal
El ejército de Estados Unidos reanudó los vuelos de sus aeronaves Osprey en Japón después de tres meses inmovilizadas en este país asiático tras un accidente mortal.
En noviembre, uno de estos aparatos, que pueden despegar y aterrizar verticalmente como un helicóptero y de volar como un avión, se precipitó al mar al sudoeste de Japón, provocando la muerte de los ocho soldados estadounidenses a bordo.
Este suceso llevó al ejército estadounidense y a las Fuerzas de Autodefensa Japonesas a dejar en el suelo las naves de este modelo, implicadas en una larga serie de accidentes mortales.
El Pentágono autorizó el viernes la reanudación de los vuelos de Osprey en el mundo entero después de anunciar modificaciones en el mantenimiento y en los procedimientos para solucionar el "fallo material" en el origen del último accidente.
El Ministerio de Defensa japonés advirtió en la víspera que las fuerzas estadounidenses y niponas preveían reanudar "progresivamente" los vuelos de los convertiplanos Osprey.
Este departamento atribuyó el accidente de noviembre a "ciertas piezas defectuosas", no a "problemas en la concepción y la estructura de los Osprey".
En la isla de Okinawa, donde están apostadas la mayoría de tropas estadounidenses en el país, la población y las autoridades locales ven con malos ojos el uso de estas aeronaves.
El gobernador de la prefectura, Denny Tamaki, dijo el miércoles estar "extremadamente enfadado" por la reanudación de sus vuelos.
Estados Unidos ya inmovilizó sus Osprey en Japón en 2016 tras un accidente en Okinawa que dejó varios heridos.
Desde 2022, además del incidente en Japón, se han producido accidentes mortales en Noruega, California y Australia.
G.Loibl--MP