Nuevos bombardeos israelíes en la Franja de Gaza
La Franja de Gaza fue de nuevo este jueves escenario de bombardeos y combates entre el ejército israelí y Hamás, después de que Israel abriera la puerta a hablar con Estados Unidos sobre su proyecto de ofensiva terrestre en la ciudad de Rafah.
El Ministerio de Salud de Hamás informó el jueves de al menos 66 muertes en Gaza durante la noche, en su mayoría en bombardeos. Por su parte un alto funcionario local informó de combates cerca de Ciudad de Gaza, en el norte de la Franja, y en Jan Yunis, en el sur.
El ejército israelí, que acusa a los combatientes del movimiento islamista palestino de ocultarse en hospitales, continúa su operación lanzada el 18 de marzo en el complejo hospitalario Al Shifa en Ciudad de Gaza.
En Jan Yunis, los soldados están llevando a cabo operaciones cerca de los hospitales Naser y Al Amal, así como en el área de Al Qarara.
El ejército indicó en un comunicado el jueves que había "eliminado a unos 200 terroristas en el área del hospital Al Shifa" desde el inicio de las operaciones.
Las tropas israelíes "evacuaron a civiles, pacientes y equipos médicos a instalaciones médicas alternativas establecidas por el ejército para permitir la continuación de los tratamientos médicos apropiados", afirmaron las fuerzas armadas.
Según la Media Luna Roja Palestina, el hospital Al Amal ha dejado de funcionar por completo tras la evacuación de civiles que se encontraban allí. El ejército israelí dijo el jueves que había "eliminado a docenas de terroristas en el sector de Al Amal", donde sus tropas "encontraron artefactos explosivos y proyectiles de mortero".
Junto a sus ofensivas en Ciudad de Gaza y Jan Yunis, Israel planea una operación terrestre en Rafah, una ciudad del sur de Gaza que considera el último bastión de Hamás y donde hay 1,5 millones de palestinos hacinados, la gran mayoría desplazados por la violencia en otras partes del territorio.
Estados Unidos, el principal aliado de Israel, teme el costo humano de esa operación.
La reciente adopción de una resolución en la ONU exigiendo un "alto el fuego inmediato", que fue posible gracias a la abstención de Estados Unidos, enfureció al gobierno israelí.
Pero el miércoles un alto funcionario estadounidense dijo que el gabinete de Benjamin Netanyahu está ahora dispuesto a hablar con Washington sobre la posible ofensiva en Rafah.
Por su parte, Catar, que actúa como mediador junto a Egipto y Estados Unidos, aseguró esta semana que las negociaciones indirectas entre Israel y Hamás continúan, con el fin de lograr una tregua y un intercambio de rehenes israelíes por prisioneros palestinos.
- Alimentos en paracaídas -
La guerra se desencadenó por un ataque del movimiento islamista palestino Hamás contra Israel el 7 de octubre, que dejó al menos 1.160 muertos, principalmente civiles, según un recuento de la AFP basado en datos israelíes.
Según Israel, unas 250 personas han sido secuestradas y 130 de ellas siguen siendo rehenes en Gaza, entre ellas 34 que se cree que han muerto.
En represalia, Israel prometió "destruir" a Hamás, que considera una organización terrorista, al igual que Estados Unidos y la Unión Europea, y lanzó una vasta operación que dejó 32.552 muertos, en su mayoría mujeres y menores de edad, según el Ministerio de Salud de Hamás.
La guerra también ha causado una catástrofe humanitaria en el pequeño territorio palestino, donde la mayoría de los 2,4 millones de habitantes están amenazados de hambruna, según la ONU.
La ayuda humanitaria por vía terrestre está controlada por Israel y llega a cuentagotas. En paralelo, varios países árabes y occidentales lanzan alimentos en paracaídas a diario, especialmente en el norte de la Franja de Gaza, donde la situación es desesperada.
Hamás anunció el martes la muerte de 18 personas, de las cuales 12 se ahogaron cuando intentaban recuperar alimentos que habían caído al mar en paracaídas, y pidió que cesen estos lanzamientos.
"Cuando los paracaídas cayeron al agua, hombres jóvenes y niños comenzaron a caminar en su dirección. Desafortunadamente, algunos no han regresado", dijo a la AFP Uday Nasar, testigo de la tragedia.
L.Gschwend--MP