El anhelado baño en el Sena, una batalla que todavía no está ganada
El asunto sigue provocando sudores fríos en los organizadores de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París (26 julio-8 septiembre): las pruebas de natación previstas en el río Sena dependen de la calidad del agua, que ha mejorado, pero que en el verano local de 2023 no fue satisfactoria.
Los análisis realizados de 2015 a 2023, transmitidos a la AFP por la alcaldía de París, mostraron fuertes variaciones en el verano pasado, con varios picos de concentración de una de las dos bacterias indicadoras de contaminación fecal, Escherichia Coli.
Según la directiva europea de 2006 sobre este asunto, ninguno de los 14 puntos de toma de muestras de agua en París alcanzó un nivel de calidad suficiente entre junio y septiembre de 2023.
La concentración de E. Coli superó el máximo autorizado en todos esos puntos y la de enterococcus, la otra bacteria que se tiene en cuenta en la normativa, superó ligeramente el umbral en dos puntos.
En el verano francés de 2022, las muestras tuvieron un nivel "suficiente" sobre esas dos bacterias en tres puntos de medición del centro de París, antes de que los datos se fueran degradando en 2023.
Paul Kennouche, jefe del servicio que controla la calidad del agua en la ciudad de París, subraya que de los ocho "grandes puntos" seleccionados por el gobierno municipal, seis han visto cómo la calidad iba mejorando y dos se mantienen estables. Sin embargo, ninguno de ellos alcanza el nivel contemplado en la directiva europea.
Tanto el ayuntamiento como el gobierno regional destacan que "en el lugar de las pruebas de natación en el Sena, el 70% de las medidas diarias fueron buenas en el periodo del 1 de junio al 7 de septiembre de 2023".
Pero eso no tranquiliza a los deportistas, como la vigente campeona olímpica en aguas abiertas, la brasileña Ana Marcela Cunha, quien en una reciente entrevista a la AFP reclamó "un plan B", teniendo en cuenta que la ONG Surfrider Foundation advirtió del estado "alarmante" de las aguas del Sena, con niveles de calidad entre septiembre y marzo "por debajo e incluso muy por debajo" de lo recomendado.
"Nunca se ha planteado abrir el Sena al baño durante todo el año", trató de defender el prefecto de la región Marc Guillaume.
- Pesadilla el pasado agosto -
Las autoridades y los organizadores argumentan también que las cinco obras que deberían permitir aumentar la capacidad de almacenaje de la red de desagües y limitar así los vertidos de aguas resiuales al río están a punto de acabarse.
Antes de su puesta en servicio, los ensayos generales ("test-events", en lenguaje olímpico) de agosto de 2023 se convirtieron en una pesadilla para los organizadores y una competición de natación de larga distancia, prevista a primeros de ese mes, fue cancelada luego de que los umbrales de calidad exigidos por la Federación Internacional (World Aquatics) se superaran claramente después de unas fuertes lluvias, un episodio "excepcional", según los organizadores.
Los análisis mostraron una concentración en E. Coli que triplicaba el máximo recomendado.
Días más tarde, estaba prevista una competición de triatlón y paratriatlón (del 16 al 20 de agosto de 2023), en la misma zona, pero hubo dos jornadas canceladas por polución del agua, causada esa vez por una válvula defectuosa, según la alcaldía.
Desde entonces, la Alcaldía de París ha anunciado que su procedimiento de análisis se iba a redoblar para el verano de 2024 (dos muestras, dos ingenieros, dos laboratorios).
- "Hemos aprendido" -
Los responsables municipales tienen claro que la experiencia de los 'test-events' debe ser valiosa: "Hemos aprendido", subrayan desde la municipalidad para defender las nuevas medidas.
La Alcaldía, la prefectura de la región y sus colaboradores han establecido un plan a partir de "todas las consecuencias de lo que pasó en el verano (2023)". Insisten además en la dotación de nuevas infraestructuras para absorber las fuertes lluvias.
Pero la meteorología sigue siendo el "riesgo principal" para la correcta disputa de los Juegos, reconoce la prefectura, que teme que haya "lluvias excepcionales".
El plan B contempla el aplazamiento de unos días de las pruebas a disputarse en el Sena, pero no un cambio de lugar.
Más allá de los Juegos, las obras apuntan a una mejora duradera de la calidad del agua pensando en la apertura de una treintena de puntos en los que el baño estará autorizado en los dos ríos que recorren la región parisina, el Sena y el Marne.
O.Braun--MP