El G7 busca un principio de acuerdo para ayudar a Ucrania con activos rusos congelados
Los ministros de Finanzas del G7 reunidos en Italia quieren sentar el sábado las bases de un acuerdo para ayudar a Ucrania con los intereses generados por los activos rusos congelados, aunque la decisión definitiva no se tomará hasta mediados de junio.
Las conversaciones ocurren en medio de la ofensiva lanzada hace dos semanas por Rusia en la región de Járkov, en el noreste de Ucrania, que Kiev aseguró el viernes haber detenido.
Sin embargo, los combates prosiguen y el ejército ucraniano reconoció el sábado "éxitos parciales" de las tropas rusas y una "situación tensa" en la zona de Ivanivka, en el sur del país.
Entre reiterados llamados de Kiev para que los países occidentales aceleren los suministros de armas, su ministro de Finanzas, Sergui Marchenko, asistirá por la mañana a una sesión del G7 dedicada a la ayuda a su país.
"Tenemos que llegar el sábado a una declaración de principios que marque el acuerdo global de los países del G7 de usar los beneficios de los activos rusos para financiar Ucrania", estimó el viernes el ministro francés de Economía, Bruno Le Maire.
El representante galo reconoció "problemas técnicos" para alcanzar un consenso, pero insistió en que el objetivo es "tener un principio de acuerdo político y no una solución definitiva".
El comisario de Economía de la Unión Europea, Paolo Gentiloni, describió el viernes "un clima de convergencia positiva" en la espinosa cuestión de los activos rusos, pero reconoció que hay "todavía muchos detalles a esclarecer".
El ministro anfitrión, el italiano Giancarlo Giorgetti, dijo en la misma línea que esperan "poner los fundamentos para una solución en la cumbre de mediados de junio" de los jefes de Estado y de gobierno del G7 en Apulia, en el sur de Italia.
- Primer paso -
Los países de la Unión Europea dieron un primer paso a principios de mayo con un acuerdo para embargar los intereses generados por los activos congelados de Rusia con el fin de armar a Ucrania.
Se calcula que estos ingresos serían de entre 2.500 y 3.000 millones de euros anuales (2.700 y 3.250 millones de dólares).
Estados Unidos quiere ir más allá y presiona para que los países del G7 aprueben un préstamo de unos 50.000 millones de dólares a Kiev garantizados por los intereses generados en el futuro por estos activos rusos inmovilizados.
Pero hay muchas cuestiones para clarificar: cómo se repartirá el riesgo entre Estados Unidos y Europa, cómo evolucionarán en el futuro los tipos de interés o quién emitirá la deuda.
Además, un acuerdo para un monto tan elevado se antoja improbable.
"El objetivo es tener un método y de tener seguridad en la financiación de Ucrania. No vamos a hablar del monto. Pienso que primero hay que hablar del método", dijo el francés Le Maire.
- Posibles represalias de Moscú -
La idea de la administración estadounidense de Joe Biden es garantizar también una ayuda duradera a Ucrania ante un eventual regreso de Donald Trump a la Casa Blanca tras las presidenciales de noviembre.
Estados Unidos propuso en febrero que los países del G7 incautaran simplemente el total de activos rusos congelados, pero luego renunciaron ante las reticencias de sus aliados por la creación de un peligroso precedente jurídico y las posibles represalias de Moscú.
Pero recurrir únicamente a los beneficios generados por estos activos también puede provocar una respuesta de Rusia, advierte Jean-Paule Castagno, abogada especializada en derecho internacional del gabinete Orrick.
"Dado que Rusia considera el uso de los intereses de los activos inmovilizados en Europa como un 'robo', es muy probable que responda contra grupos occidentales todavía presentes en su territorio", dice a la AFP.
De hecho, el presidente ruso, Vladimir Putin, ya ha movido ficha y el jueves firmó un decreto que autoriza la confiscación de activos pertenecientes a Estados Unidos o a personas asociadas a ese país.
P.Walsh--MP