Evacuados los primeros turistas franceses de Nueva Caledonia
Los primeros vuelos de evacuación de turistas varados en Nueva Caledonia, un territorio francés en el Pacífico, partieron el sábado del archipiélago, informaron las autoridades locales, que intentan contener una ola de violentos disturbios.
El aeropuerto internacional de la capital Numea permaneció cerrado más de una semana y los vuelos comerciales fueron cancelados al menos hasta el martes debido a los disturbios.
"Continúan las medidas para enviar a casa a los turistas extranjeros y franceses", indicó el gobierno de Nueva Caledonia en un comunicado.
Los turistas partieron el sábado a Australia y Nueva Zelanda desde el campo aéreo Magenta en Numea a bordo de aviones militares, según un periodista de AFP.
Desde allí tomarán vuelos comerciales al territorio continental francés.
"Vine de vacaciones a visitar a mi mejor amiga (...) Estalló el conflicto y quedé atrapada" en Numea, comentó a la AFP Audrey, una francesa que no reveló su apellido.
Australia y Nueva Zelanda comenzaron a repatriar sus nacionales el martes.
La tensión ha disminuido gradualmente para las personas atrapadas en el territorio desde el estallido de los disturbios el 13 de mayo en contra de una propuesta de reforma del censo electoral.
Siete personas han muerto en la violencia. La última fue un hombre fallecido por tiros de un policía que fue atacado por los manifestantes.
Nueva Caledonia ha estado bajo el mando francés desde los años 1800, pero muchos integrantes del pueblo autóctono canaco resienten el poder de París sobre sus islas y reclaman más autonomía o independencia.
Francia pretende darles derecho al voto a miles de residentes no autóctonos, algo que según los canacos diluirá su influencia electoral.
El presidente francés, Emmanuel Macron, visitó el jueves el archipiélago para intentar contener la crisis política.
En su visita aseguró que la reforma electoral no será impuesta a la fuerza.
Macron aseguró el sábado que está dispuesto a celebrar un referendo sobre la polémica reforma aunque dijo esperar que las autoridades caledonias puedan alcanzar un acuerdo.
Francia impuso un estado de emergencia y envió a cientos de policías y militares para ayudar a restaurar el orden en el territorio, situado a unos 17.000 kilómetros de Francia continental.
M.P.Huber--MP