Johnson lucha por seguir al frente de Cámara de Representantes con bendición de Trump
El republicano Mike Johnson lucha este viernes por seguir a la cabeza de la Cámara de Representantes con el apoyo de Donald Trump pero bajo fuerte presión porque esta institución necesita a un presidente para poder certificar la victoria electoral del magnate.
Y no parece que vaya a ser un camino de rosas.
Los republicanos tienen una mayoría raquítica de 219 escaños contra los 215 de los demócratas y Johnson necesita que todos menos uno voten por él, suponiendo que estén presentes.
Johnson, un abogado de 52 años, consiguió el puesto en 2023 después de un golpe de palacio que paralizó la Cámara de Representantes durante semanas.
Pero algunos miembros de su partido lo consideran excesivamente consensual y blando en materia de recortes de gastos.
Uno de ellos ya avisó que votará en contra de él.
En mayo pasado 11 republicanos votaron a favor de destituir a Johnson después de que enfureciera al ala trumpista llevando a la Cámara un enorme paquete de ayuda a Ucrania. De aquella los demócratas lo salvaron.
Si no se ponen de acuerdo sobre un presidente de la Cámara para el lunes, el Congreso no podrá certificar la victoria de Trump, lo que podría hacer demorar la agenda del magnate que volverá a la Casa Blanca el 20 de enero, tras un primer mandato de 2017 a 2021.
- "El menos objetable" -
"Conversamos constantemente sobre todo ello. Creo que esos miembros, todos ellos, quieren formar parte de estas soluciones", declaró Johnson a Fox News esta semana.
"Hicieron grandes promesas a sus votantes (...) y tenemos que cumplirlas", agregó.
Se espera que los 215 demócratas voten por su líder, Hakeem Jeffries, como lo hicieron cuando Johnson ganó en 2023.
Si Johnson no logra su objetivo, el proceso continuará hasta una segunda votación, probablemente también el viernes.
Un fracaso en las rondas posteriores abriría el camino para que los conservadores opuestos a él muevan ficha o se concierten conversaciones secretas entre los dos partidos que podrían desembocar en la elección de un republicano de consenso respaldado por los demócratas.
Pero no se ha planteado públicamente ninguna alternativa creíble a Johnson.
Tres pesos pesados del partido, Steve Scalise, Tom Emmer, y Jim Jordan, han mostrado interés en el puesto, pero ninguno de ellos logró ganar en 2023.
El presidente de la Cámara de Representantes se ha pasado parte de las vacaciones de Navidad al teléfono.
Según el medio de comunicación del Congreso Punchbowl News, Johnson no está interesado en "acuerdos secretos".
Su situación es compleja debido a que cuantas más concesiones haga a los radicales más se aleja de los moderados, cuyo voto también necesita.
"Solo era elegible la primera vez porque no había ocupado ningún tipo de puesto de liderazgo, ni había luchado nunca por nada, así que a nadie le desagradaba y todos estaban cansados de votar", publicó en la red social X el conservador de Kentucky Thomas Massie, el único que declaró que no apoyará a Johnson.
"Ganó por ser el candidato menos objetable, y ya no posee ese título", añadió.
Ch.Mayr--MP